Imagina que miras al delantero estrella de tu equipo de fútbol recibiendo un pelotazo en la parte baja… AHÍ donde duele! Seguramente harías un gesto de dolor porque te ves a tí mismo en esa situación e imaginas cuánto duele. ¿Por qué nuestros cuerpos responden de esa manera?
En el cerebro humano existen unas células llamadas neuronas espejo, que se activan en dos situaciones: cuando ejecutamos una acción, y cuando observamos que otra persona ejecuta una acción. El “problema” es que esas neuronas espejo no pueden distinguir entre ejecutar y observar…
… Así que, cuando miras que alguien es golpeado ahí abajo por la pelota, tus neuronas espejo se activan y tu cerebro piensa que tú fuiste golpeado.
¿Cómo usar esas neuronas espejo para influir sobre la gente aprovechando el internet?
Sólo necesitas recordar una cosa. Cuando las personas ven a alguien ejecutando una acción en un video, pensarán que fueron ellos mismos quienes realizaron la acción. Y si la gente cree que ellos ejecutaron una acción, estarán más dispuestos a realmente realizar esa acción. ¿Por qué? Porque ya están pensando en realizarla. Entonces, si tú quieres que la gente tuitee tu nuevo video, puedes incluir al final de tu video una escena donde tú mismo estés tuiteándolo. O, si quieres que la gente compre tu producto al ver tu video, puedes incluir al final de tu video una escena donde tú mismo recorras el proceso de compra.
¿Puedes influir en las personas aprovechando las neuronas espejo sin necesidad de un video?
La respuesta es, SÍ. Pero, ¿Cómo lo logras? Todo lo que tienes que hacer es escoger las palabras correctas para hacer que la gente adopte el correcto estado mental. Por ejemplo, dale un vistazo a la manera en que empecé este artículo:
“Imagina que miras al delantero estrella de tu equipo de fútbol recibiendo un pelotazo en la parte baja…”
En lugar de mostrarte un video de un partido de fútbol, hice que lo imaginaras por tí mismo. Eso es producir una imagen mental en el cerebro de tu público objetivo. Y esa es la mejor manera de activar las neuronas espejo utilizando sólo texto. Por todo eso que te acabo de explicar en este artículo, es que el marketing digital es más psicología que tecnología. Más que saber usar las herramientas tecnológicas (si no lo sabes puedes delegarlo), debes entender el comportamiento de tus consumidores para que seas capaz de influir en ellos de una manera ética pero poderosa al mismo tiempo.
Fuente: CarlosCabrera.net